Ya casi terminamos el primer trimestre del año pero esto no significa que sea demasiado tarde para poner orden en tu empresa y direccionarla al camino correcto. En este post compartiremos los 3 métodos más famosos para definir objetivos de una empresa: SMART, PURE y CLEAR con sus respectivos ejemplos.

Desafortunadamente, son muy pocos los líderes de negocios o directivos que toman tiempo suficiente para definir objetivos específicos en sus negocios. Esta torpe tendencia causa que los negocios vayan a la deriva sin un rumbo claro, improvisando y sobreviviendo al día a día, algo que económicamente puede volverse insostenible. ¿De qué lado estás tú?

¿Por qué es importante definir objetivos específicos en una empresa?

Los objetivos representan para una empresa el punto de partida para saber el camino a recorrer. Definir los objetivos permitirá que tus colaboradores puedan enfocarse en las metas que son más importantes, entender con claridad las responsabilidades que conlleva cada uno y fortalecer la rendición de cuentas.

De esta manera todos podrán trabajar hacia el logro de los mismos objetivos y la compañía podrá ejecutar la estrategia de una forma más rápida. 

Estos son los 3 métodos más famosos para definir los objetivos de una empresa

Cada día surgen nuevas metodologías que ayudan a los líderes de negocios plantear bien los objetivos específicos a corto, mediano y largo plazo. La mayoría de estas tecnologías son útiles y prácticas tanto para las grandes corporaciones como para aquellos pequeños negocios que apenas comienzan a definir sus primeros objetivos, por eso a continuación presentamos los tres más populares:

Los objetivos SMART

La técnica de los objetivos SMART es la más utilizada para escribir objetivos. La palabra SMART – que significa “inteligente” en inglés – es un acrónimo de las specific, measurable, achievable, result-based y time-related. Esta metodología busca básicamente construir objetivos inteligentes que acerquen a los resultados y faciliten los esfuerzos para la medición de los rendimientos.

Veamos cómo se soporta la creación de los objetivos SMART:

• Specific (específico): ¿Es el objetivo lo suficientemente detallado?

Esta es la pregunta que debes formularte para reconocer si un objetivo es específico. Detallar y concretar al máximo es crítico para redactar buenos objetivos, porque cuando esto es así, es posible crear objetivos secundarios, que a su vez se vuelven útiles para concretar y reforzar la finalidad principal.

• Measurable (medible): ¿Se puede elegir un atributo cuantitativo o cualitativo para crear una métrica?

Lo que no se mide, no se puede mejorar. Eso ocurre con los objetivos. Estos deben estar unidos a un valor numérico.

• Achievable (alcanzable): ¿Es tu empresa capaz de cumplir ese objetivo?

Los objetivos tienen que ajustarse a la realidad de la empresa y entorno. Las metas realizables son retadoras, pero con expectativas realistas y coherentes con las capacidades de la organización.

• Result-based (orientado a los resultados)

Un objetivo está orientado a los resultados cuando ataca los problemas específicos que enfrenta la compañía y sus directivos y colaboradores. Las metas basadas en los resultados son aquellas que tienen una estrecha relación con la misión y visión del negocio, que son cercanas y que se dejan permear por el entorno.

• Time-related (oportuno): ¿Los objetivos están enmarcados en un momento específico?

Una meta oportuna le deja claro al equipo el tiempo en el que se debe ejecutar y cumplir.

Este es un ejemplo de objetivos SMART:

Aumentar el número de visitas a nuestro sitio web en un 50 %, de 3.000 a 4.500, en los próximos 3 meses.

Los objetivos PURE

Los objetivos PURE – que significa “Puro” en inglés – son un acrónimo de positively stated, understood, relevant y ethical. Esta técnica se enfoca en aspectos más filosóficos para la definición de los objetivos. Lo que propone el método PURE es una revisión de las metas enunciadas desde los cuatro ángulos que componen su acrónimo:

• Positively stated (enunciados en positivo)

Describir lo que se quiere obtener y no lo que se quiere evitar. Según la metodología PURE, formular un objetivo en positivo es más constructivo y motivador para los equipos de trabajo.

• Understood (entendible)

Cada objetivo plasmado en el plan debe quedarle claro a cada miembro de la empresa. Si alguno de los integrantes del grupo no comprende uno de los objetivos al leerlo, este se debe reformular.

• Relevant (relevante)

Los buenos objetivos tienen una relación directa con la compañía, el entorno y las circunstancias. La relevancia es una cualidad muy importante, porque es la encargada de revisar cuan estrecha es la relación entre los objetivos y los problemas que se enfrentan a diario. Los objetivos relevantes tienen una relación vinculante con la realidad del negocio, son cercanos y próximos.

• Ethical (ético)

La ética siempre por delante. Muchas organizaciones, afortunadamente, han emprendido un viaje sin retorno hacia la sostenibilidad y el respeto por el entorno; razón por la cual la ética se ha ganado un espacio dentro de los objetivos corporativos.

Un ejemplo de objetivos PURE:

Transición de usar energías de carbón y petróleo por energías limpias y renovables. Esto para el plazo de 3 años, viendo en el futuro para la empresa.

Los objetivos CLEAR

La técnica de objetivos CLEAR es también utilizada para la formulación de objetivos eficaces, sobre todo a nivel empresarial. No está claro quién fue la primera persona en aplicar esta técnica, pero su utilización se ha extendido muchísimo en el mundo de los negocios. Se trata de un sistema de cinco indicadores con los que se evalúan cada uno de los objetivos que persigue el negocio antes de ponerlos en marcha. Las letras que componen la palabra CLEAR – que significa “claro” en inglés son la combinación de challenging, legal, enviromentally sound, apropiatte y recorded. Veamos de que tratan cada una:

• Challenging (desafiante)

Los objetivos desafiantes son aquellos cuyo resultado tiene un alto valor para la compañía y exigen un gran esfuerzo. Si no es desafiante no es un objetivo, sino una mera tarea.

• Legal (legal)

Cada objetivo debe estar regido por el marco legal del lugar en el que se llevarán a cabo las acciones para conseguirlo.

• Enviromentally sound (inofensivo para el ambiente)

La sostenibilidad es un área primordial para las empresas actuales; es por esto que se debe tomar en cuenta cuando se definen las metas.

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• Apropiatte (apropiado)

Los objetivos válidos siempre son coherentes, los unos con los otros. La mayoría de compañías acumulan un buen número de objetivos en su plan, es por esto que deben validar que los unos sean congruentes con los otros, para evitar escenarios contradictorios.

• Refinable (optimizable)

Los objetivos nunca deben ser tallados en piedra. Con esto queremos decir que los negocios pueden permitirse que estos evolucionen. Es muy importante que quienes redacten los objetivos puedan refinarlos y optimizarlos, para mantenerlos vigentes y acorde con la evolución del mercado.

Ejemplo de objetivos CLEAR:

Aumentar el tráfico web un 40% (de 1.000 a 1.400 visitas mensuales) para enero de 2018, con el fin de aumentar las oportunidades de venta.

Como vez, la definición de nuestros objetivos en base a estas tres metodologías son algo parecidas. Lo mejor que podemos haces es combinarlas siendo específicos en nuestros objetivos y siempre viendo el lado ético y legal de cada uno de ellos.

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Julio Castro | Director General CorpoNet | SAP Business One México